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Estos días aunque no he subido blog he estado bajando al gimnasio todos los días y hacia lo que el pie me dejaba hacer, creo que ya os dije que he superado el absurdo miedo al ultimo escalón, la puerta nueva de acceso a la sala de fitness no la han puesto arran de rampa como yo creía, la ha puesto algo mas atrás con lo cual puedo abrirla sin ningún problema.
Hoy al irnos al gimnasio mi asistente me ha querido soltar un momento para tirar algo a la papelera y he sido incapaz de quedarme solo esperando, todo indica que otra vez tengo problemas de equilibrio y esto también se traslada a la sala y a casa que voy buscando pared allí donde voy.

Lo único que se me ocurre es que con Esther trabajemos por tramos el recorrido desde casa al gimnasio y como viene también mi asistente personal me sentiré mas seguro al principio ya que con la fuerza y el peso que estoy cogiendo si me caigo una persona sola es imposible que pueda evitar que me caiga, que ese es el mayor por no decir el único problema el miedo a caerme, que toda mi vida me he caído y nunca me ha afectado para nada era caerme levantarme y seguir mi camino, Lo mas complicado será la vuelta a casa, ya estamos hablando de absolutamente toda la cuesta de la calle del gimnasio, estoy bajando las escaleras para llegar a la entrada del gimnasio y bajo animado pero en cuanto veo la salida me entra el miedo a caer hacia atrás, el viernes de la semana pasada creo que fue le dije a mi asistente que quería probar a subir y en cuanto se separó tres pasos de mi ya no pude continuar subiendo y lo bueno es que procuro no apoyarme mucho en el brazo y simplemente que estén entrelazados ya me da la seguridad suficiente para subir, es de cabeza y esta vez el miedo se ha apoderado de mi bastante con lo cual tendremos que trabajar con una seguridad extrema e ir poco a poco desmontándola a medida que me empieza a volver a encontrar seguro.